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Por Karen Ali
A Alexander Williams, propietario de Blue Earth Compost Inc., en Hartford, le encanta la idea de una legislación dirigida a ayudar a que las pequeñas empresas como la suya promuevan planes de ahorro para la jubilación.
"Siempre estamos ampliando el negocio. Así que recibir ayuda para implementar esta opción sería un paso en la dirección correcta", señaló Williams, de 27 años, cuya empresa tiene tres empleados, y con planes de contratar más.
Gracias a un nuevo programa de seguridad para la jubilación, alrededor de 600,000 empleados más en el estado podrán ahorrar para la jubilación a través de deducciones automáticas por nómina. Connecticut es uno de los 10 estados que han promulgado programas de trabajo y ahorro; 30 estados más están considerando medidas similares.
La legislatura estatal creó la Connecticut Retirement Security Authority (Autoridad de Seguridad para la Jubilación de Connecticut) en el 2016 para permitir que los trabajadores del sector privado se inscriban en cuentas de ahorro para la jubilación si no tuvieran acceso a ellas.
La legislación beneficia a aquellos que ahorran, a los contribuyentes y al estado de Connecticut”, señaló John Erlingheuser, director de activismo y alcance comunitario de AARP Connecticut. Si esos trabajadores ahorraran tan solo $1,000 más al año para la jubilación, el estado podría ahorrar $90 millones en programas de servicios sociales para el 2032, anotó.
Erlingheuser enfatizó que "el costo para las empresas es cero para este programa", y agregó que la primera fase comenzará con participación voluntaria en el 2019.
Autosustentable y voluntario
La autoridad semipública que administra el programa es autosustentable en términos financieros, no es financiada por los contribuyentes. Los costos operativos se cobrarían de los cargos que los empleados pagan a los proveedores de servicios financieros, y esos costos tienen límites.
El presidente de la Connecticut Retirement Security Authority, Scott Jackson, señaló que el programa de trabajo y ahorro es bueno para las empresas porque ayudará con la contratación de empleados en un mercado laboral competitivo.
"Es una oportunidad para que los empleadores mantengan buenos empleados, porque ahora tienen un beneficio que tal vez no hayan tenido antes", agregó Jackson.
Según el Instituto de Política Pública de AARP, alrededor del 44% de los empleados del sector privado de Connecticut trabajan para un empleador que no cuenta con un plan para la jubilación.
El Seguro Social ofrece beneficios de jubilación, pero el cheque mensual promedio es tan solo de $1,400, según cifras federales.
El instituto informa que alrededor del 90% de los hogares que participan en planes de jubilación en el lugar de trabajo afirman que las deducciones por nómina facilitan el ahorro.
Kevin Lembo, contralor del estado, que responde preguntas frecuentes sobre el programa de trabajo y ahorro en su sitio web (en inglés), señaló que una preocupación común es la cantidad que los contribuyentes tendrán que pagar.
Su respuesta: "Nada. Este programa está diseñado para ser autosustentable".
La participación de los empleados es estrictamente voluntaria, señaló Lembo, miembro de la junta directiva de la autoridad. Agregó que los participantes "pueden cambiar su nivel de contribución en cualquier momento y aumentarla, reducirla o eliminarla".
Lembo también señaló que si bien las personas pueden obtener cuentas IRA por sí mismas, muchas no lo hacen.
“Simplemente no sucede por una variedad de razones, incluidos el costo y la falta de conocimiento sobre la industria financiera. Es un hecho que los índices de ahorro para la jubilación aumentan enormemente cuando existe la posibilidad de deducciones por nómina".
Karen Ali es escritora y vive en Waterbury, Connecticut.
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