AARP Eye Center
Por Karen Ali
Marie “Mimi” Peck-Llewellyn tiene un título en derecho y es asesora para adultos mayores sobre temas de fraude, pero a pesar de eso, ella misma terminó intercambiando correspondencia con un estafador cuando comenzó a buscar pareja por internet después de la muerte de su esposo hace dos años.
“No importa cuán informado estés”, dijo a la audiencia durante una sesión de capacitación de la Red Contra el Fraude, de AARP, en Hamden.
“Le puede suceder a cualquiera”, dijo Peck-Llewellyn, de 63 años, una abogada de planta para el Departamento sobre el Envejecimiento adscrito al estado.
La capacitación estaba diseñada para enseñar a voluntarios de todas las edades, incluidos los estudiantes de Quinnipiac University, a impartir talleres entre pares sobre el fraude.
El método entre pares —en el cual los voluntarios hablan con personas de edades y experiencia similares— se ha usado como un modelo formal por parte de AARP desde el 2014.
Más recientemente, AARP ha unido fuerzas con Quinnipiac University para capacitar a estudiantes sobre el uso del modelo, de manera que puedan crear consciencia sobre el fraude en el campus.
“Las mismas cosas que les ocurrían a los estudiantes, le ocurría a la población de adultos mayores”, comentó Erica Michalowski, directora estatal asociada para alcance comunitario en AARP Connecticut, quien estuvo a cargo de la capacitación.
“El fraude contra consumidores es un problema que no distingue edades”, señaló.
Un estudio de Stanford University del 2010 demostró que el método entre pares es una estrategia eficaz para ayudar a evitar que las personas mayores caigan en las estafas. Michalowski señaló que es porque la gente tiende a escuchar a sus contemporáneos más que a una figura de autoridad.
“Es una situación poderosa cuando le das información a las personas sobre cómo protegerse”, dijo Michalowski a los voluntarios durante la capacitación. “Recibimos entre 10 y 15 solicitudes mensuales para hacer estas presentaciones”.
Para obtener información acerca de una presentación de la Red Contra el Fraude en tu localidad, envía un correo electrónico a emichalowski@aarp.org o llama al 860-548-3163.
Catherine Richards Solomon, directora del Departamento de Sociología, Justicia Penal y Antropología en Quinnipiac, anticipa que este modelo funcionará bien allí. Los estudiantes son más propensos a denunciar las agresiones sexuales a un compañero en vez de hacerlo ante un administrador, señaló, y también son más propensos a aprender sobre el fraude a través de otros estudiantes.
Los estudiantes son especialmente vulnerables al fraude, debido a que pasan tanto tiempo en línea, dijo Solomon. “Están siempre conectados, y es ahí donde los estafadores se dirigen”.
Las estafas se presentan de muchas formas
Existen otros métodos que los estafadores usan para llegar a sus víctimas, tales como el teléfono, tocar a la puerta o por correo, según los voluntarios dijeron a la audiencia. Desde estafas con cheques falsos, robo de identidad hasta estafas a través de la computadora y otras más, los estafadores se están volviendo cada vez más creativos, agregó Michalowski.
“Este es su trabajo a tiempo completo”, afirmó acerca de los estafadores. “Cuando ven que la gente está descubriendo sus estafas, tienen que encontrar otra forma de buscar tu dinero.”
Patricia Bright, de 65 años, voluntaria de Seymour para la Red de Contra el Fraude comentó a los voluntarios que no se trata de si las personas serán o no víctimas del fraude, sino de cuándo lo serán. “Solo tienes que saber que te va a llegar y cómo manejarlo”.
En el caso de Peck-Llewellyn, sus instintos le decían que la persona al otro lado de la conversación en línea podría no ser quien decía ser, y quizás ser un estafador.
“Le dije, ‘¿Qué te parece si nos conocemos en persona?’ y él se mostró reticente a que nos reuniéramos”, comentó Peck-Llewellyn, quien ayudó a lanzar la Coalition for Elder Justice en Connecticut, que ayuda a organismos, a fiscales y a otras personas a proteger a los residentes mayores.
Aunque los estafadores se enfocan en personas de todas las edades, los adultos mayores son particularmente vulnerables, afirmó Byron Peterson, voluntario de Shelton para la Red Contra el Fraude. Los estafadores asedian a la población de adultos mayores debido en parte a que muchos de ellos tienen dinero.
“En el momento en que decidimos jubilarnos es cuando más dinero tenemos en la vida, y los estafadores lo saben”, agregó Peterson, de 71 años. “Pueden ser muy agradables, pueden ser tus mejores amigos”.
Pero también, añadió, “Pueden ser desagradables y amenazantes. Una vez que te encuentran, persiguen una sola cosa: tu dinero”.
No dejes que te estafen. Mantente al tanto de los trucos de los ladrones con nuestra sección de Estafas y Fraudes.