Pablo Rehbein

Con los aumentos en los planes médicos y los medicamentos, cada día es más cuesta arriba cuidarte como te mereces. No obstante, tal vez no conozcas todas las opciones para ahorrar dinero al cuidar de tu salud y a su vez ampliar tus posibilidades – sigue estos consejos y compártelos con los tuyos:

El día menos pensado se te puede quedar el carro en el lugar menos indicado y puedes correr peligro – especialmente si te quedas de noche o en el paseo de la autopista donde puedes ser arrollado. ¿Tienes un plan? Ya sea un fallo mecánico, que se caliente el motor o se explote una goma, es importante saber qué hacer. Para ayudarte a tener un plan sigue estos consejos:

Evita que jueguen con tu dinero –

Por José Acarón, director estatal de AARP Puerto Rico.

Aportación de Idalia I. Zavala Maldonado, Ed. D.(Promotora de Redes Sociales de AARP P.R.)

Tal vez no lo hayas pensado, pero estás constantemente apoyando a tus padres u otro ser querido en un sinnúmero de actividades cotidianas. Nos referimos a asuntos tan elementales del diario como proveer ayuda con el baño, limpieza del hogar, vestirse, alimentación, administrar medicamentos, cuidar de heridas o transportación a citas, entre otros. ¿Suena familiar?

Cuando alguien conocido cae víctima de una estafa lo primero que le escuchamos decir es: “nunca pensé que esto me podía pasar a mí”. No podemos olvidar que los criminales desarrollan tácticas cada vez más sofisticadas incluso para las mismas viejas estafas. Entonces, ¿cómo puedes proteger tu dinero y evitar caer en “los pescaítos”? Para que no “te duermas como el camarón y no te lleve la corriente” mantente alerta a estas estafas comunes:

Hoy día todo el mundo tiene un teléfono inteligente, que se ha convertido en la herramienta indispensable para hacer de todo en el mundo en que vivimos. Lo que pasamos por alto es que nuestro teléfono es una mini computadora que almacena información personal sensible y, por lo tanto, representa una oportunidad de oro para los ladrones de identidad. ¿Suena exagerado?

Evita que jueguen con tu dinero -

Por: Aida Pagán